Un padre se va con su hija a ver una exposición de cuadros y se queda muy sorprendido al ver que hay unos cuantos desnudos que se parecen a su hija. Al fijarse en detalles como los lunares se indigna muchísimo al comprobar que efectivamente la retratada es su hija, asi que la coge del brazo y se la lleva a un rincón aparte de la gente.
- Hija, ya sé que este pintor es amigo tuyo, pero... ¿Cómo has sido capaz de posar desnuda para él?
- Pero papá... ¿Qué te crees? ¿Que yo no tengo mi dignidad o que? ¡Me habrá pintado de memoria!