La recepción había terminado y los novios se habían escapado para una cabaña en un resort cercano. Luego de beber champaña el novio se retira al dormitorio. Pero la novia se sienta en un sillón de la terraza y se sienta a observar el cielo y las estrellas.
Al rato viene el esposo, un tanto impaciente, y pregunta:
- ¿No vienes a la cama?
- No, mi madre me dijo que esta iba a ser la noche más hermosa de mi vida y no me quiero perder ni un minuto.