- Doctor, doctor, fíjese que no me aguanto de ir al baño y siempre me hago pipí. El otro día fui al cine y cuando acabó la película ya estaba todo mojado y ni cuenta me había dado.
El doctor lo analiza y le dice: Pues no mi amigo, no encuentro el problema, esto es para un especialista, déjeme recomendarle un urólogo, al tiempo que abre el cajón donde guarda las tarjetas de presentación, pero el doctor se equivoca y la da la de un psicólogo.
Tiempo después encuentra al paciente y le pregunta:
- Oiga amigo ¿Cómo le fue con su problema?
- Muy bien doctor -le contestó- el especialista que me recomendó es muy bueno.
- ¿Ah sí? -le dice el doctor- ¿entonces ya no se hace pipí?
- ¡Sí, todavía me hago, pero ya no me importa!