Un hombre vivía en un pueblito pequeño, y un día lo invitan a una fiesta, y se acuerda de que tenia un amigo en la ciudad que le podía prestar unos zapatos de charol.
Se los presta su amigo con la condicion que los cuide muy bien, y en la noche va a la fiesta. Al rato se pone a bailar con una señorita de vestido, y como el zapato relucía, se lo pone entre las piernas de la señorita y el reflejo era como espejo...y le dice: oye niña tu tienes el calzón rojo no? Y la muchacha sorprendida le dice: sí! ¿Cómo lo supo?, Y este le contesta: es que tengo poderes mágicos.
Esta chica va donde sus amigas y les cuenta lo ocurrido. Entonces las chicas más atrevidas bailan con el hombre, y este fue viendo sus calzones, verde, blanco, etc.
Las mujeres estaban impresionadas con el hombre. Pero de repente una se anima a bailar sin calzón con el hombre. Estaban bailando cuando el hombre se fija en el reflejo del zapato y exclama: oye niña estas sin calzón no? Y la chica le responde: si señor, cómo lo supo?. El tipo responde: Ah! Que suerte! Creí que se había roto el zapato.