Un día, un padre va a entrar en la habitación de su hijo, pero decide quedarse en la puerta a oirle rezar:
Niño: Dios bendiga a Mamá, Papá y la abuela. Adios abuelo
El padre muy extrañado no le pone atencion pero al dia siguiente fallece el abuelo. Al día siguiente también escucha rezar a su hijo y se repite lo mismo:
Niño: Dios bendiga a Mamá y a Papá. Adios abuela.
El padre to' austado se va de alli y se olvida. Al día siguiente muere la abuela. A la noche el padre va a oir a su hijo rezar:
Niño: Dios beniga a Mamá. Adios papá.
El padre cagao de miedo se aleja sigilosamente y se mete en la cama, se levanta por la mañana y con cuidado desayuna, con un cuidado tremendo se mete en el coche, conduce a 20 por hora hasta el trabajo, llega con miedo horrible, a la hora del café hace horas extra, vuelve a su casa a 25 por hora y entra a su casa:
Padre: Mi amor, he tenido un día terrible
Madre: ¡Anda que yo! ¡Casi me da un infarto! Se ha muerto el lechero en la puerta de casa