En una fiesta los organizadores se dieron cuenta de que había muchas más personas de las que habían invitado.
Entonces dijo el organizador de la fiesta, "Ahora sí los voy a chingar." Y toma el micrófono y dice, "Los invitados de la novia que se pasen del lado izquierdo, y los invitados del novio que se pasen del lado derecho."
Todos corrieron para los lados, y sólo unas 10 personas se quedaron en medio.
Y dice el de la fiesta, "¡Todos se me van a la mierda, porque este es un bautizo no una boda!"